Una enérgica Virtus superó a un Barça sin ideas y con una clara falta de orden, notando la baja del checo Satoransky. Los azulgranas, perdieron el partido en un último cuarto repleto de pérdidas de balón y ocasiones falladas. Aunque los resultados van cumpliendo, falta mucha intensidad y mucho juego para ver a esta plantilla llena de estrellas.
El Barça empezó el primer cuarto completamente dormido. Desacertados desde línea de 3 y extremadamente flojos en defensa, dejando espacios en el perímetro. Los azulgranas, sin ninguna intensidad y notando ofensivamente la baja de Satoransky , fueron arrollados por una Virtus liderada por Lundberg y Ojeleye, que ejecutaron a la perfección lo que pedía Scariolo desde la pizarra. (15-24)
Pero en el segundo cuarto, los de la ciudad condal le dieron la vuelta al partido. Probablemente, Saras les dio un par de tragos mágicos de esa leche que también, hoy mismo, va a otorgar a los tres reyes magos, para que los suyos renaciesen. De 12 abajo, con un juego rápido, sólido en defensa desde la entrada de Da Silva (cada día más protagonista) y ofensivamente acertados, los culers alcanzaron a los de Bologna en el marcador, acercando así a los de casa a tan solo tres puntos en un segundo cuarto extraordinario culminado por un 2+1 de Nikola Mirotic a falta de 9 segundos. (39-42)
El tercer cuarto tuvo un ritmo altísimo. Puramente ofensivo. Kuric destacó por su actividad en los primeros minutos y a partir de ahí, el partido cogió un ritmo trepidante. Toma y daca constante. El Barça, tal vez, careció de calma. Los bases no ponían orden (partido muy justo de Jokubaitis, que quiso brillar por luz propia aún sin acierto). A los del Palau les costó encontrar a Mirotic, mientras que la Virtus, más cómoda que los azulgranas en este tipo de encuentros, hizo destacar a un Lundberg que realizó un gran partido. Aún así, los de Saras siguieron sumando con anotación repartida.
El partido se fue a los últimos 10 minutos con los italianos 3 arriba. (57-60)El cuarto cuarto fue, si más no, complicado para los azulgranas. Empanada general en los dos primeros minutos, dejando que los italianos se fueran 7 arriba. Los culers, tras dos certeros ataques, equilibraron marcador y fuerzas, pero en los últimos tres minutos, los italianos, enérgicos y sólidos en defensa, forzaron muchas pérdidas de los locales y se llevaron el partido con la gran ayuda de Ojeleye y Milos Teodosic, este último clave en el perímetro con dos espectaculares triples que silenciaron al Palau. (75-83)
