Mañana a las 19:30h el Barcelona enfrenta al Valladolid en un nuevo intento de ponerle presión al líder, el Real Madrid. El conjunto de Quique Setién podría incluso ponerse momentáneamente por delante en la clasificación en función de lo que hagan los blancos esta noche ante el Alavés.

Dejando un momento de lado las cuestiones clasificatorias, lo más importante para el Barça es recuperar en el José Zorrilla las buenas sensaciones cosechadas en el partido ante el Villarreal y que se esfumaron frente al Espanyol. La versión ofrecida en el derbi no augura buenas cosas de cara a esta recta final de la Liga ni tampoco para el difícil partido de vuelta de los octavos de final de la Champions League ante el Nápoles.

Los jugadores azulgrana volvieron a las andadas, con una circulación de balón muy lenta, sin que nadie desbordara de manera individual y sólo fueron capaces de generar espacios una vez los dos equipos se quedaron con 10 futbolistas sobre el césped. Ante el Valladolid de Sergio González el Barcelona volverá a tener delante un equipo que no le va a pelear la posesión de balón ni le va a presionar demasiado alto. Así pues, el partido en Pucela servirá como nuevo examen para el cuadro catalán.

Si el Barcelona es capaz de ganar y recuperar el buen juego, cogerá impulso para lo que queda de temporada. Por el contrario, si la imagen ofrecida ante el Espanyol se mantiene, será muy difícil creer ya no solo en la Liga, en la que no depende de él mismo, sino en levantar la Champions, cuyo camino ha quedado definido este mediodía. El cuadro azulgrana se enfrentaría presumiblemente ante el todopoderoso Bayern si supera al Nápoles. Además, equipos como la Juventus, el Manchester City o el Real Madrid han quedado también en el mismo lado del cuadro, por lo que el camino no podía antojarse más complicado.

Con este contexto de fondo, el Barça visitará el José Zorrilla con las bajas de Ansu Fati por sanción, Umtiti y Dembelé por lesión. Otro que no estará en Pucela será De Jong, quien no ha llegado a tiempo en su recuperación y no será expuesto al riesgo de una recaída. Con la consolidación de Sergi Roberto en el centro del campo, el ostracismo de Arthur tras su firma con la Juventus y el mal partido ante el Espanyol de hombres como Arturo Vidal o Rakitic, podría abrirse una nueva oportunidad para Riqui Puig. A partir de ahí, pocas alternativas más para un técnico azulgrana que alineará de nuevo, salvo sorpresa, al tridente formado por Messi, Luis Suárez y Griezmann en punta de ataque.

Con todo, el Barça enfrenta al Valladolid en un partido prácticamente definitivo en su persecución por el título de Liga. Una buena prueba de cara a todos los cara o cruz que va a tener en este tramo final de temporada tan atípico.