Las palabras de Piqué al finalizar el encuentro de Champions frente al Bayern hace una semana después de caer derrotados en el Camp Nou por cero goles a tres, resuenan con fuerza todavía en las cabezas de los culés después de un nuevo tropiezo en casa, esta vez en liga, y frente al Granada. Decía uno de nuestros capitanes “somos los que somos y esto es lo que hay”. No son pocos los que desde dentro del club se han ido uniendo al mismo discurso, el primero Ronald Koeman, y, la verdad, a Laporta también parece gustarle la idea para justificar una temporada que, ya en septiembre, parece destinada a ser un completo fracaso.

El presidente se dedica a grabar videos para contarnos su versión de los acontecimientos, y el entrenador sale hoy a rueda de prensa, nos lee un discurso preparado escrito en un papel, se levanta y se va a su casa, no sé si a descansar o a preparar otro discurso por si perdemos frente al Cádiz este jueves, algo que, por cierto, ya sucedió la temporada pasada cuando los gaditanos acababan de ascender de categoría. Me imagino que un discurso presentando su dimisión no se le ha ocurrido prepararlo, prefiere preparar el que dará cuando lo destituyan, que no parece que falte demasiado.

A ver, lo que hay ahora mismo, es un club en ruinas, pero eso ya lo sabía el señor Laporta cuando se presentó a las elecciones y nos vendió durante meses la renovación de Messi, el cambio de entrenador, una revolución y renovación profunda de la plantilla, inversores y patrocinadores dándose bofetadas por entrar en el club, y la posibilidad de hacer algún gran fichaje. Pues bien, el problema es que no ha habido renovación de Leo, no hemos cambiado de entrenador, y encima hemos largado a García Pimienta que era un entrenador de la casa y que contaba con el beneplácito de la afición, en el equipo siguen casi los mismos de siempre, el dinero de los inversores y los patrocinadores apenas nos ha alcanzado para inscribir a los jugadores, y el bombazo de última hora del FC Barcelona ha sido ceder a Griezmann al Atlético y traer cedido al quinto delantero del Sevilla, De Jong.

En cuanto a Koeman, siempre nos han vendido lo “Cruyffista” que es. El problema, es que el Barça le viene muy grande, que el equipo no está bien trabajado, ni defensivamente, ni tácticamente. Que dice que juega con extremos, pero estos siempre juegan a pierna cambiada y se cierran cuando encaran, que cuenta con los jóvenes, pero que estos suelen entrar cuando vamos perdiendo y difícilmente tienen continuidad en las alineaciones salvo que las lesiones o sanciones de los veteranos lo permitan, y que, además, cada partido cambia de sistema.

La segunda parte del Barça el lunes frente al Granada, es un homenaje en toda regla al Osasuna en las grandes noches del Sadar. El problema es que no sabemos ni a lo que jugamos.

En lo que a la plantilla se refiere, estoy totalmente de acuerdo en que tenemos una hornada de canteranos y jóvenes jugadores llegados de otros equipos extraordinarios. Con Iñaki Peña, Tenas, Dest, Mingueza, Araujo, Erik García, Balde, De Jong, Riqui Puig, Nico, Gavi, Demir, Collado, Pedri y Ansu Fati, el futuro está asegurado, el problema es que, en el presente, algunos jugadores veteranos juegan muchos más minutos de los que deberían, y tapan la progresión de los jóvenes. No tengo dudas de que los aficionados serían pacientes con estos jugadores en el campo, pero no se nos puede pedir paciencia con otros como Umtiti, Lenglet, Coutinho, Sergi Roberto o Dembélé. ¿De verdad con estos jugadores más Memphis y Stegenno nos da para tirar ni una sola vez a puerta contra el Bayern ni a ganar al Granada en casa?