Con un final de temporada de lo más atípico a causa del parón por el coronavirus, que mantuvo el deporte en pausa durante más de tres meses, al Barcelona se le acumula el trabajo. Con la disputa por una Liga que se antoja más que complicada, la pugna por la tan soñada Champions a la vuelta de la esquina y con el mercado estival ya en marcha, los culés tienes varios frentes por resolver.

Si nos centramos en la competición europea que se jugara durante el mes de agosto, el Barça deberá deberá medirse al Nápoles en un partido único, se espera con el equipo ya confeccionado casi del todo.

Con la mala situación económica que atraviesa el club a día de hoy, los catalanes necesitan hacer caja para reponer las arcas de un Barça al que las cosas no le están saliendo bien en este tramo final de campaña. Precisamente, su rival para los octavos de final de la máxima competición europea ha puesto el ojo en dos futbolista azulgranas, en cuyos servicios estaría interesado de manera inmediata.

El primero de ellos es Marc Cucurella, jugador de la cantera reciente traspasado al Getafe, pero en cuyo nuevo contrato el Barcelona estipuló llevarse un 40% de los beneficios en una futura venta del jugador, por parte del conjunto azulón.

Por otro lado, Junior Firpo sería el segundo elegido por el Nápoles para completar su plantilla de cara al curso que viene y reforzar así el lateral izquierdo con dos futbolistas jóvenes de garantía. Ninguno de los dos se espera que regresen a un Barcelona, dentro del cual la competencia entre futbolistas es de máximo nivel, por lo que el conjunto culé podría mejorar su situación económica, si finalmente se suceden los traspasos de ambos laterales.

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