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Se celebran cada 4 años, las gana alguien más bien mediocre y con juego sucio. ¿Laselecciones? No señores, las ligas del Real Madrid.

Los cálculos salen, en 12 años, 3 ligas. Y si, sabíamos que volver a jugar esta Liga estaba demasiado preparada para el Real (cómo les gusta que los llamen, suena más a equipo del Régimen). Cuando ves que las jornadas son tan seguidas que no te da tiempo ni a quejarte del atraco que a los 2 días vuelven a hacerlo y aquí nadie hace nada. Hablamos de 4 robos en 12 días… Ya vimos cómo ganaron sus ligas Mourinho y Zidane, Youtube
está ahí para demostrar todos sus atracos con extensos vídeos.

Ese Domingo 8 de Marzo en el Benito Villamarín empezó todo, cómo en la fiesta de Cristiano con Kevin Roldán en 2015. Mientras la gran parte humana del país se centraba en estar unidos para afrontar la mayor crisis de nuestra historia, otros optaron por hacer llamadas a ciertos estamentos para reanudar la Liga sin importar la situación que se estaba viviendo, criticar la gestión del gobierno ante algo sin precedentes. Porque sí, si
mezclo política con fútbol es porque pienso que viene de los mismos. Los mismos que recriminan esta gestión al Gobierno son en grandísima parte los mismos que lloran de emoción al ver ganar a su Madrid. Porque si, la frase de que no todos los del Madrid son fachas pero que todos los fachas son del Real, cobra, a día de hoy, cada vez más fuerza.

Esa derrota en Sevilla dolió tanto cómo la marcha feminista al día siguiente, porque repito, les duele a los mismos. Ayer para rematar nos vuelven a machacar por enésima vez esta temporada. ¿Partido difícil para el Barça? Mateu Lahoz de árbitro. Bueno, ahora que la cosa está muy caliente en Barcelona con el tema de los arbitrajes lo ponemos en el VAR para que no se note tanto y no se vea a primera vista. Eso sí, que no intervenga en el penalti a Piqué y sí en la repetición del penalti del Atleti.

Lo que me reconforta es que ser culé va más allá de un sentimiento, ese lema de ‘Més que un club’ que sigue latente escrito en la grada este del Camp Nou, cobra cada vez más fuerza con momentos duros cómo este. Seguimos siendo autocríticos con la plantilla a pesar de lo que nos están haciendo. Ver la luz con Riqui Puig y Ansu Fati es lo que nos sigue haciendo creer y debemos, a pesar del resultado de ayer, celebrar que el mejor de todos los tiempos marcó su gol 700 con nuestra camiseta.

Visca sempre.

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