Mientras el grueso de la sociedad española espera en la segunda o la tercera fase de la desescalada, el fútbol de primera división ya ha entrado en la llamada “nueva normalidad”. Un regreso que busca volver a la rutina pero con ciertas diferencias. Sin embargo, hay cosas que no cambian.

Por el lado positivo, los aficionados azulgrana pudieron ayer disfrutar de nuevo de Leo Messi, que tuvo una actuación más que destacable con dos asistencias y un gol. El argentino se mostró clarividente en la combinación, eléctrico en las veces que decidió arrancar y letal dentro del área. Como si no hubiera estado parado durante más de noventa días.

Además del concurso individual de Messi, el partido que realizó todo el equipo fue notable. El gol primerizo de Vidal otorgó mucha tranquilidad a los culés, que amasaron mucha posesión de balón y acabaron imponiéndose al Mallorca por un marcador quizás demasiado abultado.

Sin embargo, no todo fueron buenas noticias en el cuadro catalán. Para empezar, Frenkie De Jong tuvo que retirarse del terreno de juego con molestias. No parecen revestir demasiada gravedad pero en este tramo final tan frenético hay que ir con mucho cuidado. Y además, se consumó uno de los presagios de los defensores acérrimos de la cantera y su uso en la primera plantilla del Barça. Riqui Puig, que a priori podría ganar algo de protagonism con la introducción de los cinco cambios, ni siquiera saltó a calentar.

El joven centrocampista es una de las grandes promesas de la Masía junto a Ansu Fati, quien explotó casi por sorpresa. Si bien es cierto que al inicio de temporada parecía complicado que el catalán tuviera minutos dada la elevada cantidad de efectivos en esas demarcaciones, ahora sí existía cierta esperanza. Es verdad que solamente ha sido el primero de los once partidos de liga que le quedan al Barcelona, pero con un marcador tan favorable, ante un rival en zona de descenso y con la posibilidad de hacer cinco sustituciones, no se nos ocurre un escenario más adecuado para darle minutos y confianza al chico.

Habrá que ver cómo gestiona Quique Setién al canterano en los próximos partidos. Riqui sigue empeñado en no salir en préstamo pero por el momento parece que desde el club se le esté empujando a aceptar alguna de las ofertas de cesión que han llegado al Camp Nou.