¿Hasta cuándo tenemos que esperar para que aquí se produzcan cambios de una vez? ¿Hasta cuándo tenemos que aguantar a Valverde de entrenador? ¿Hasta cuándo hay que aguantar a Bartomeu y su directiva hipotecando año tras año al club? ¿Hasta cuándo? ¿Qué hay que esperar a que se produzca otra debacle en Champions? ¿Hasta que nos quedemos con toda la plantilla con jugadores de más de 30 años? Basta ya.

En el Barça, con la mayoría de entrenadores que hemos tenido siempre hemos ido de más a menos. ¿Por qué? Porque entran en una dinámica de monotonía, el mensaje (como dice Guardiola) cansa, pierden la motivación, empiezan los malos hábitos, etc. Con Guardiola, hasta la temporada 2010-2011, vimos al mejor Barça de la historia, un equipo de 10 que, a partir de la 2011-2012, aunque siguió siendo un buen Barça, ya empezó a bajar un poco (de un diez a un nueve) su nivel por los motivos que ya he comentado anteriormente.

Seguidamente, con el fallecido Tito Vilanova y el Tata Martino se fue bajando el nivel progresivamente (con el Tata se notaba ya que los jugadores tenían actitudes negativas). Posteriormente llegó Luís Enrique, el cuál renovó los aires y quitó los malos hábitos y actitudes del grupo. Claramente consiguió devolver al Barça al camino de la excelencia alcanzando de nuevo un triplete de forma magistral. Sin embargo, a partir de la segunda mitad de la temporada 2015-2016, el equipo volvió a coger malos hábitos, los cuáles continuaron en la siguiente temporada yendo a mucho peor.

Desde la temporada 2017-2018, con la llegada de Ernesto Valverde, el Barça ha ido también de más a menos. En la primera temporada, sin ser un gran Barça, el equipo por lo menos dominaba los partidos con mucha seguridad e autoridad, jugando con un futbol bueno aunque no seguimos nuestro estilo al 100%. A partir de la segunda se intenta volver al esquema clásico 4-3-3 y el Barça, de nuevo, fruto de bajar la intensidad, malos hábitos, jugadores jugando por decreto todos los partidos con ya una edad cada vez más avanzada en vez de entrar más en la rotación, baja aún más el nivel de los años malos anteriores volviéndose un equipo aburrido, sin intensidad, vulgar, ofreciendo un fútbol sin contenido, en definitiva, un equipo que se va a la deriva por el camino de la mediocridad.

A lo que yo me pregunto: ¿Hasta cuándo, socios e aficionados? Los socios y los aficionados, aparte de directiva y cuerpo técnico, somos los máximos responsables de esto. ¿Por qué? Por la sencilla razón de que si nosotros mostramos nuestro enfado, sobre todo los socios, la directiva se vería obligada a cambiar. Por favor, actuemos ya antes de que el barco se hunda y ya no haya vuelta atrás. Por favor, no caigamos en una “Era Gaspart” 2.0, si no acabaremos como el AC Milán… o peor. Reaccionemos.

Ver otras noticias de nuestro blog