Partido “venenoso” le espera a un Barça que viene inmerso en una mini racha de malos resultados y muy mermados en lo que se refiere a la efectividad de cara a portería, enfrente tendrá un Getafe CF que viene de perder en el Reale Arena y tratará de llevarse la victoria en detrimento de los culés.
Apenas quedan 9 jornadas ligueras para que finalice el campeonato doméstico y nadie quiere dejarse puntos que puedan afectar a sus intereses. Pese a que el margen de error es grande, no se puede dejar llevar por la relajación de tener una distancia de trece puntos a costa de los de Chamartín y debe ir a por los tres puntos con la máxima concentración posible.
El conjunto dirigido por Xavi Hernández no podrá contar por lesión con total seguridad con O.Dembélé (sigue en proceso de recuperación), Pedri González (está en la etapa final y pronto empezará a entrenar con el grupo), Frenkie de Jong (se esperaba su presencia en este encuentro, pero tocará esperar un poco más) y Andreas Christensen (no se sabe el alcance de sus molestias físicas).
Por parte de los azulones recibirá al FC Barcelona con las bajas aseguradas de Jaime Mata (lesión del gemelo que lo mantendrá al margen) y de Mauro Arambarri (operado del tobillo y será baja).
Quienes creen que va a ser un paseo militar no saben que el Coliseum Alfonso Pérez es de los estadios más difíciles de visitar y donde los azulgranas el año pasado no pudo pasar del empate. La afición getafense es de esas aficiones que aprietan y se hacen notar, tratarán de ayudar a su equipo para llevarlos hacia la victoria.
Las excusas no sirven y los blaugranas deben saltar al campo con la convicción clara de ganar el partido, pero sobre todo dejar una imagen más que aceptable sobre el terreno de juego.
El rendimiento en los últimos encuentros está dejando mucho que desear y el primer objetivo de cara a lo que queda de temporada es jugar mejor, pero sobre todo volver a ser el equipo que dominaba y sometía a sus rivales gracias a la posesión. Evitar cometer errores en zonas comprometidas y desconexiones que puedan perjudicar al buen hacer del Barça.
Por tanto, es vital salir con la máxima intensidad, ya que cada choque es importante y se le debe dar la misma importancia, sea un rival de más o menos envergadura, el compromiso no se negocia y dejar hasta la última gota de sudor es lo mínimo que exige la afición culé.
Para este encuentro el míster local propondrá un once muy definido y muy marcado, por lo que no se espera una gran revolución en el plan inicial pese a la derrota dolorosa que sufrió el pasado sábado. En cuanto al cuadro azulgrana no se esperan muchas variaciones y en este momento rotar no tendría sentido, ya que el equipo no está compitiendo en una ninguna competición europea ni tiene compromisos coperos entre semana, por lo que Xavi deberá alinear su mejor once.
El partido estará arbitrado por el colegiado Pulido Santana del comité canario y será la primera vez que medie tanto a los blaugranas como a los azulones. A destacar que suele ser bastante “tarjetero” y saca una media de más 5 amarillas por partido, deja fluir el juego y en algunas ocasiones es permisivo.