¿Qué nos dejó el encuentro Barcelona vs.Nápoles? Fundamentalmente la actitud. Después de tantas dudas, dichos y desencuentros, pudimos ver a un equipo que salió a buscar el triunfo (por momentos con aciertos y también errores), movilidad y deseos: rescatable.

Defensivamente se cumplió de manera aceptable, medio juego que llevó adelante una actitud positiva, sin poder contar con Sergio Busquets – no es poco decir – y sabiendo que tampoco estaría en la banca Arturo Vidal. En los mejores momentos de Frenkie de Jong si valoramos cuanto se necesita a este jugador, retomando el nivel que supimos conocerle en el Ajax. Ivan Rakitic fue su socio en ese sector del campo de juego, con un primer tiempo de cierta tranquilidad. En el segundo período las cosas cambiaron, el Nápoles comenzó a presionar unos metros adelante, creando situaciones ante la portería culé.

El tridente tuvo en Lio al mejor exponente, sumándole a su habilidad natural, un despliegue digno del capitán azulgrana. Luis Suárez no logra despegar hacia sus mejores momentos y Antoine Griezmann con un nivel sumamente bajo, desapercibido en muchos pasajes del encuentro.

No fue desde ya un Barcelona brillante ni mucho menos: cumplió y punto. Abrió la llave, pasar a cuartos ¿ahora?: pensar en el Bayern Munich, equipo duro, difícil que exigirá a la plantilla blaugrana seguramente, de manera mucho más puntual que el Nápoles. Momento álgido, de incertidumbre: la lesión de Lionel, pareciera que no corre peligro su participación ante el equipo alemán.

Banca de relevos, si queremos darle un tinte positivo: ver que la juventud en cuanto se viene, tendrá papel preponderante. No es poco decir, máxime en tiempos donde lo económico y con ello eventuales compras, abren paréntesis y dudas.

Párrafo aparte para el VAR: nuevamente pareciera que la tecnología existente más el equipo arbitral encargado del mismo, están empeñados en prohibirle a Messi disfrutar goles que prima facie, son válidos. El fútbol, sus características fundamentales, deporte de contacto, fricción, situaciones que surgen en un instante, por ello ser tan finos a la hora de definir penas, quitan todo aquello que hacían a este deporte sumamente bello, distinto. No carguemos todas las culpas al VAR (que supuestamente llegó para establecer mayor justicia (¿?) sino en aquellos árbitros que tras varias pantallas más los que están en el campo de juego, después de observar, analizar, definir, toman las decisiones. Pareciera que sus conceptos fueran de personas que jamás jugaron al fútbol, ni siquiera como amateurs. El gol en cuestión de Lio, observando lo que esta gente también observara, no da crédito alguno para ser anulado. Situaciones análogas en el partido Juventus vs Lyon.

En definitiva: muchas dudas a los aportes válidos de las tecnologías aplicadas al fútbol.

El FC Barcelona deberá recurrir a su amplio bagaje de conocimientos en estas lides, una Champions con condimentos distintos, especiales: la capital de Portugal – Lisboa – será anfitriona de este evento, el 14 de agosto se definirá esta fase, donde el equipo culé pondrá sus mejores cartas en un campo de juego.