Una vez mas y fuera de una cancha de fútbol: Lucho, Lio y Ney fueron noticia. Amistad que trasciende el mas allá de un balón, aficiones, estadios. Aman compartir momentos de la vida (familias, hijos, vacaciones), ¿esta vez? El futbolista uruguayo reafirmo los votos a una década de su matrimonio, en Uruguay natal, mas precisamente en la ciudad balnearia de Punta del Este.

¿Juntos? Se los vé felices, distendidos, escapando a la rutina de todo un año de trabajo, viajes, entrenamientos, horarios. Y no es fácil que esto suceda, las relaciones entre jugadores estrellas suele ser difícil, egoísmos, personalismos como en tantas otras actividades. En estos últimos años, la vida, circunstancias, alejaron a uno de ellos de la plantilla culé: Neymar Jr. voló de Barcelona a París. Tanto se dijo, se dice, ¿posibilidades de un retorno anticipado? Marchas y contramarchas.

Creo que en todo este intríngulis: ninguna de las partes se vió favorecida de la manera esperada. ¿Y lo peor? Quienes amamos al fútbol de verdad: nos vemos privados de disfrutar al tridente de mayor notoriedad quizás: de la historia de este deporte. Esa felicidad que trasciende a sus rostros, cada vez que se juntan: debería volver a “expresarse” en idioma futbolístico de estos tres superdotados del balompié: jugadas excelsas, regates y cataratas de goles.

Mientras estos temas seguramente estarán en los escritorios de dirigentes, empresarios, representantes, y todo el marketing que rodea a los deportes de alta competición, ¿ellos? disfrutan de unos pocos días alejados de ese marco que los pasea por todo el mundo, sin solución de continuidad. Un año se vá, en sus alforjas éxitos, traspiés…abriéndole las puertas a ese 2020, que como Nuevo Año acerca ilusiones, esperanzas: ellos y nosotros. La pasión se extiende, se identifica con casacas, jugadores, triunfos…y ¿ porque no? Algún fracaso artero que nos recuerda: “de esto se trata vivir, compartir…y competir”.

A la hora de los deseos fervientes: y anticipando a la llegada de los Reyes Magos, ventura y paz para la humanidad…¿para nosotros? Que precisamente esos tres reyes del fútbol mundial: a corto plazo vistan la casaca barcelonista, azulgrana, familia culé. Que así sea!

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