Un año donde el club Barcelona pareciera transitar de manera permanente por caminos no indicados. La gestión del Presidente Bartomeu, un caos que lo afecta como así también a los demás integrantes de la Directiva, hizo posible esta moción de censura que lo pone en una situación extrema, con plazos de entre diez y vente días para llamar a elecciones.

No obstante, el presidente pretende dar batalla legal, los abogados del club presentaron denuncia de fraude, falsificación de firmas ante la Comandancia de la Guardia Civil de Barcelona. ¿Simple dilación de este proceso? ¿Qué busca la Directiva con esta presentación?

Según las encuestas Bartomeu no soportará la presión que pesa sobre sus espaldas, de ahora en más la justicia tendrá papel relevante. Las 19.532 firmas válidas para la moción, estipulan por otro lado, la condena social, de la parcialidad a esta gestión que termina volando por los aires.

El responsable jurídico Jordi Farré y el arco opositor que lo acompaña, superó con amplitud el número estipulado de 16.521 firmas válidas, para acceder al referéndum. Esa votación que se llevaría a cabo – fecha a confirmar – deberá contar con el visto bueno de la Generalitat de Cataluña dada la situación que se vive en esta pandemia de Covid 19.

Comentaba en mi anterior nota, si bien existe receso por fecha FIFA, en el culé se viven momentos álgidos: moción de censura, baja de salarios, números negativos en sus cuentas, con una pandemia que promete seguir castigando a la situación socioeconómica mundial a niveles impensados.

Responsabilidades puntuales más imponderables, tendrán resultados nefastos para las instituciones deportivas, futbolísticas, empresas que son sponsor de las mismas, ver caer sus ventas de manera ostensible. El universo se encuentra en una encerrona de difícil pronostico, sigo sosteniendo que aún no se magnifican los daños presentes y a futuro cercano.

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