Ousmane Dembélé sufrió a mediados de temporada la rotura completa del tendón del bíceps femoral de la pierna derecha y a partir de allí el Barça no ha podido contar con el francés en toda la temporada. Sin embargo, el futbolista de 23 años apunta a poder estar presente en el duelo de vuelta de los octavos de final de la Champions League ante el Napoli el próximo 8 de agosto en el Camp Nou.

Sin dudas ha sido una baja sensible para el equipo, pero más sensible ha sido para Setién, quien lo consideraba como un refuerzo al momento de asumir como técnico blaugrana. Desde su lesión en febrero, el francés le habría metido con toda la ilusión de volver a las canchas y eso estaría a punto de suceder. Todo indicaría, que el campeón del mundo con su selección en Rusia 2018, podría llegar a volver o por lo menos estar entre los convocados para el duelo ante los italianos, un partido que será importantísimo para el futuro de Setién en el banquillo del Barcelona.

El extremo, ex Borussia Dortmund, había recibido un pronóstico de seis meses de baja y ese tiempo, desde su operación en Finlandia por el doctor Sakari Orava, se cumpliría esta semana. Claro que para el partido ante los italianos, llegará sin ritmo pero con el alta médica recibido.

Al igual que en gran parte de la temporada, el francés, hoy en la vuelta a los entrenamientos tras la semana de descanso permitida por el cuerpo técnico, se entrenó de manera diferenciada con respecto a los demás jugadores y realizó un trabajo específico junto a los médicos del plantel.

Con diez días restantes para el partido de vuelta contra los dirigidos por Gennaro Gattuso, Dembélé tratará de exigirse lo máximo posible, y tratar de llegar de la mejor manera al encuentro, para junto a sus compañeros, poder sacar adelante esta difícil llave que tiene el Barcelona y meterse entre los ocho mejores equipos de Europa.

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